¿Eres un amante del arte y estás pensando en acudir a la ciudad condal en tu próxima escapada? Tengo el plan perfecto para ti: la ruta Gaudí en Barcelona.
La ruta de Antonio Gaudí es un paseo por todos y cada uno de los monumentos del arquitecto catalán situados en diferentes lugares de la ciudad. Eso sí, ten en cuenta que vas a tener que dedicar al menos dos días para poder verlas todas. Sin duda, los edificios y las obras de Antoni Gaudí son una autentica belleza que reciben millones de visitantes y turistas cada año.
¿Te apetece descubrirlas?
Vamos allá:
Monumentos de Gaudí, una ruta por la Barcelona más artística
Sagrada Familia
De todas las obras de Gaudí, la más importante de todas es la Sagrada Familia. Es el icono de la ciudad y más de 130 años después de comenzarla, aún no se ha dado por finalizada.
La Sagrada Familia es, sin opción a equivocarse, la obra más importante del arquitecto y considerada como referente en el modernismo catalán. Gaudí tan solo tenía 31 años cuando la comenzó y en ella ya se podían apreciar sus símbolos: las torres cónicas, las ventanas, la ornamentación, los pórticos…
Lamentablemente solo pudo ver una de las torres levantadas de las 18 que van a ser en su finalización. Como detalle, te comentamos que cada una de las puertas de entrada están dedicadas a un pasaje de la vida de Jesús. En su interior, la Cripta es el lugar más importante y es justo allí donde está enterrado Gaudí.
La Sagrada Familia es el monumento más visitado de toda Cataluña y de España en general y no es para menos. Cada día miles de personas se acercan allí para disfrutar de su espectacular diseño y construcción. Y, obviamente, si visitas la ciudad de Barcelona no te puedes perder admirarla desde bien cerca y entrar para ver la ornamentación de su interior.
Eso sí, yo lo que te recomiendo es sacar las entradas con antelación. Puedes sacar entradas para la Sagrada Familia en páginas como Musement. Esta compañía te ofrece también la posibilidad de contratar visitas guiadas en la Sagrada Familia a partir de las que te asegurarás no perder detalle de la historia de cada rincón de la basílica. Te lo recomiendo, más que nada, porque allí resulta una auténtica locura de cola el intentar comprar la entrada. Más vale que vayas preparado y consigas, no solo entrar, sino saber todos los detalles de su construcción.
Colegio Teresianas
Comenzamos nuestra ruta por este colegio y convento de las religiosas Teresianas situado en la calle Ganduxer, en el barrio de Sarrià. En su diseño trabajó Gaudí y está inspirado en el estilo neogótico. En este edificio se han utilizado materiales muy básicos como el ladrillo, la cerámica y la forja.
Gaudí tuvo que ceñirse a un ajustado presupuesto que no le permitiró lucirse más en cuanto a los materiales. Eso sí, los acabados de sus almenas hacen que el edificio parezca castillo y las cuatro cruces de cuatro brazos son el toque especial del arquitecto.
Parc Güell
Sin lugar a dudas, el parque más famoso de Barcelona y uno de los más conocidos de España. Está en la cima del barrio de Gracia y en él, predominan los motivos de animales. Aunque, por si no lo sabías, en un primer momento fue contratado para realizar el diseño de una urbanización.
La salamandra es el animal que preside el recinto y llaman también la atención las gárgolas que se encuentran en los bancos de la plaza central del parque. Los azulejos de colores son el sello de identidad del arquitecto en este caso y, sin duda, te ofrece una de las mejores vistas de Barcelona. Por cierto, allí también puedes visitar la Casa-museo Gaudí, su lugar de residencia.
Casa Milà
De todas las casas de Gaudí en Barcelona, esta es sin duda una de las más conocidas. Está considerada uno de los símbolos del Paseo de Gracia y de la ciudad en general.
La obra, pese a parecer un solo edificio gracias a su única fachada, tiene en realidad dos partes diferenciadas con dos patios interiores que son visita obligada. Al igual que en el Parc Güell, en este caso también se inspiró en el estilo naturalista aunque, sí que es cierto, que también hay motivos religiosos.
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Casa Batlló
Diseñada justo antes que la anterior, la casa Batlló es otro de los iconos del Paseo de Gracia. En este caso también los motivos naturales son los predominantes y, sin duda, llama la atención el patio de luces y la azotea. En concreto, es su bóveda con forma de dragón la que se ha convertido en lo más famoso de esta obra.
Por cierto, esta obra está declarada Patrimonio de la Humanidad desde 2005.
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Casa Vincens
Con una fachada recubierta de cerámica que nos recuerda a las construcciones de la época árabe, la Casa Vicens fue una de las primeras obras del arquitecto catalán. En ella, como te decía, el estilo mudéjar, persa y bizantino son los protagonistas. Es más, debes saber que en su interior hay un techo que es muy parecido al que podemos encontrar en el Generalife de la Alhambra.
Y, pese a que Gaudí también diseñó los jardines de la casa, en la actualidad no existen ya que están ocupados por bloques de edificios. Toda una pena. Al igual que la casa Batlló, también está declarada Patrimonio de la Humanidad.
Torres Bellesguard
De esta obra llama la atención que, anteriormente, era un castillo el que se encontraba ahí. Unos restos que, obviamente, Gaudí utilizó para diseñar esta obra. Las almenas son restos del edificio antiguo y, a su lado, se incluyó una torre y una muralla medieval. En su fachada destaca, sobre todo, el azulejo hecho mosaico. El hierro es otro de los protagonistas.
Debes saber que, pese a ser un edificio privado, durante los meses de verano los jardines se abren al publico para celebrar las ‘Noches de Gaudí’.
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Palacio Güell
Con más de 2.850 metros cuadrados de superficie, el Palacio Güell fue uno de los primeros encargos de importancia para el arquitecto catalán. Para él, se presentaron más de 25 bocetos que consiguieron convertirlo en la belleza que es hoy.
En el edificio se utilizaron el ladrillo, la piedra y el hierro forjado y, sin duda, son las puertas de la entrada las que llaman más atención debido a su grandeza. Se realizaron con la idea de que los invitados pudieran entrar por ellas con sus caballos.
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Para muchos, Barcelona es una de las ciudades más bonitas del mundo y tiene una riqueza cultural y arquitectónica digna de admirar. ¿No te parece un plan fantástico para tu próxima escapada? ¡Yo ni me lo pensaba!